Se desató en la madrugada de ayer, cuando el dueño de casa se ausentó por algunas horas. Sin embargo, una vecina vio cuando dos hombres sacaban un equipo de música y un colchón del inmueble siniestrado. Lo curioso es que a los pocos minutos comenzó a arder la construcción de madera.
Como tantos otros jóvenes “nacidos y criados en este pueblo”, Gustavo Buchile ocupó hace tres años un lote del barrio Tres Arroyos con la esperanza de levantar el techo propio y edificar su futuro.
Todo quedó reducido a cenizas a la una del jueves, debido a que “alguien no tuvo mejor idea que robarme y después prender fuego”. De la humilde casilla de madera no quedó absolutamente nada y las pérdidas fueron totales.
Fueron los mismos vecinos quienes llamaron a la policía y a los bomberos, primero con la intención de denunciar la presencia “de extraños en el patio” y luego para que lleguen a apagar las llamas.
Cabe destacar que el ingreso a dicha barriada es complejo, toda vez que cuentan con un solo puente de acceso y se encuentran circunscriptos por el arroyo Negro y otros cursos de agua, que en días de invierno convierten las calles internas en un verdadero lodazal.
“De la forma en que se inició el incendio da para pensar que fue intencional. Me crié en casas de madera y toda la vida fui precavido. Así me enseñaron. Quedé sin nada, perdí documentación, papeles, ropa, herramientas”, describió ayer Gustavo Buchile.
El joven vive solo y se dedica a trabajos de construcción. Más allá de coincidir en “situaciones coyunturales del mismo barrio”, opinó que El Bolsón “se está poniendo difícil, vamos a tener que salir a hacer algo para pedirle a los jueces que los delincuentes no entren por una puerta y salgan por la otra, mientras que el pobre laburante es el que todos los días paga el pato. Si no es un auto, es una vivienda o un comercio que sufren robos, ya no somos más un pueblo tranquilo”.
Graficó que “se me quemaron motosierras, gubias, niveles, todas las herramientas de construcción, los planos de algunas obras que ya tenía contratadas, los papeles del auto y de la moto, se quemaron hasta mis recuerdos más queridos. Cosas de mis abuelos, de mi familia, no me quedó nada”.
Luego de radicar la correspondiente denuncia sobre la intencionalidad del incendio, valoró que “hoy lo único que necesito es que haya justicia, quiero pedirle a la gente que salga a la calle para pedir por la inseguridad: Esto se nos está yendo de las manos. ¿Qué tenemos que hacer, justicia por mano propia? Los jueces se tienen que poner las pilas porque acá están pasando cosas que no tendrían que suceder”, sentenció.
Gustavo Buchile pide a los jueces “que se pongan las pilas”
Social Plugin